
Complejidad irreductible
Un organismo irreduciblemente complejo está compuesto por múltiples partes, todas necesarias para su funcionamiento.
Si faltara incluso una parte, todo dejaría de funcionar.
Por lo tanto, no puede generarse directamente (es decir, mediante procesos continuos de paso a paso) mediante modificaciones sucesivas y sutiles, ya que si le falta una sola parte es, por definición, no funcional.
Dentro de un sistema funcional que ya funciona, el organismo biológico no puede producirse gradualmente, ya que todos sus componentes deben funcionar plenamente desde el principio, como una unidad integrada, construida por completo en un instante.
La célula crea estas estructuras por si misma mediante las instrucciones en el ADN, compone y descompone estas estructuras constantemente por medio de procesos eficientes.